En lo que respecta a salud, existe una infinidad de terapias destinadas a prevenir y mejorar los problemas tanto físicos como mentales y emocionales de las personas.
Estos procedimientos o técnicas están cada vez más masificados, y variados en sus metodologías, teniendo en cuenta que se descubren nuevas maneras de conocernos, sanar traumas o trastornos psicológicos. Una de estas técnicas es la arteterapia.
¿Qué es la arteterapia?
Es una metodología de sanación mental y emocional en la que se emplea la expresión artística como forma de aliviar diversos cuadros por los que los pacientes estén pasando. Estas formas de expresión a través del arte pueden desarrollarse a través de la pintura, el dibujo, el bordado, y todo aquello relacionado con la manifestación del potencial creativo.
Este tipo de estrategia terapéutica surge de manera formal después de la Segunda Guerra Mundial, la que, como todo conflicto bélico, dejó a muchos soldados con secuelas psicológicas. La arteterapia desde entonces es considerada una herramienta de expresión emocional, autoconocimiento y desarrollo personal.
Los profesionales de la salud especializados en esta área estudian un posgrado en arteterapia, y mediante esta, impulsan a sus pacientes a explorar su creatividad a través de las distintas expresiones artísticas: pintura, dibujo, fotografía, canto, escritura, y cualquier otra forma en la que estos se sientan a gusto, mejoren su estado de conciencia, la autoestima, el control de las emociones, y más.
¿Hacia quiénes va dirigida la arteterapia?
En general, cualquier persona puede beneficiarse de esta terapia de expresión artística, desde niños hasta ancianos.
Sin embargo, es especialmente ventajosa para personas con:
- Experiencias traumáticas de diversa índole
- Autismo
- Alzheimer
- Demencia
- Esquizofrenia
- Depresión
No obstante, así como se emplea con fines terapéuticos, también es útil como método preventivo y para desarrollarse en el ámbito personal, ya que sirve para expresar nuestras emociones e incluso descubrir aquellas que están alojadas en el subconsciente y que, por tanto, no son fáciles de ver ni dilucidar a simple vista, ni siquiera por nosotros mismos.
El arte como terapia: Beneficios
Sus principales beneficios son:
- Mejorar nuestras habilidades sociales y comunicacionales.
- Reducir el estrés y la ansiedad.
- Regular algunas conductas.
- Impulsar los procesos de cambio.
- Reforzar la autoestima.
Es útil para personas que padecen, por ejemplo, trastornos alimenticios relacionados con la imagen corporal. Se han visto también resultados positivos en niños y adolescentes que padecen problemas de aprendizaje y déficit atencional.
Realmente no es necesario que la persona tenga grandes dotes artísticos ni talento, basta con que posea el interés por una actividad determinada, para que a través de esta y valiéndose del lenguaje no verbal del arte, logre expresar sus emociones más profundas. El resultado de la obra tendrá un valor único, al ser la expresión auténtica de las emociones y sentimientos de su autor.
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