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Psicoinmunología: la relación entre la mente y el cuerpo

Escrito por Vida Security | Friday 20 de November, 2020.

Hay situaciones en la vida que son inevitables, sin embargo, sí podemos estar preparados para no permitir que esas circunstancias dominen nuestras emociones. De hecho, no dejar que cada evento nos afecte es importante, pues así evitamos que aparezcan enfermedades o malestares, derivados de sentimientos desagradables o negativos. Una de las disciplinas que relaciona las afecciones físicas con nuestras emociones es la psicoinmunología, de la cual hablaremos a continuación.

¿Qué es la psicoinmunología?

La psicoinmunología es la ciencia que estudia cómo lo diversos procesos biológicos están relacionados entre sí, principalmente entre el sistema inmunitario y el sistema nervioso central. Si bien la psicoinmunología ha tomado mayor protagonismo en los últimos años, no es un término nuevo. El psicólogo Robert Ader y el inmunólogo Nicholas Cohen lo acuñaron en 1975 tras confirmar que emociones como el estrés, la ansiedad o la depresión pueden afectar nuestro sistema inmune, y viceversa, e intervenir en la función del sistema endocrino y la regulación de las hormonas.

Este descubrimiento fue un gran avance para la salud física y mental, pues dio oportunidad para entender cómo se desencadena una enfermedad, por qué se vuelve crónica, encontrar una solución a muchas de ellas y qué papel juega en todo esto el manejo de nuestras emociones.

¿Qué relación tiene la psicoinmunología con la microbiota?

Entre los hallazgos, se encontró que el sistema nervioso, inmune y endocrino, interactúan con las bacterias de nuestro intestino, mejor conocidas como microbiota intestinal. Por tanto, cualquier alternación que se produzca en dichas bacterias, puede alterar alguno de los sistemas.

Por ejemplo, si hay una inflamación en nuestro intestino, por el desequilibrio de la microbiota, los niveles de dopamina y serotonina disminuyen (el 80% se producen en el intestino), afectando directamente el cerebro y, por tanto, nuestro estado de ánimo. Mientras que, en aquellas personas que se sienten decaídas por estrés, aumentan sus niveles de histamina provocando estreñimiento o colon irritable, lo cual, a su vez, genera fatiga o ansiedad.

Otro ejemplo de esta relación, es cuando se tienen parásitos en el intestino. Estos liberan histamina, provocando problemas en el sistema inmune, como alergias, Una vez que se trata el padecimiento, las alergias disminuyen.

Para cuidar la microbiota, los especialistas recomiendan hacer actividad física frecuentemente, tomar suficiente agua y llevar una alimentación balanceada rica en frutas y vegetales.

Otras líneas de investigación

Adicional a lo ya mencionado, existen otras líneas de investigación que arrojan datos relevantes y que pueden cambiar el curso de nuestro día a día. Por ejemplo:

  • Se ha demostrado que las emociones positivas brindan cierta inmunidad a las enfermedades físicas o dan paso a recuperaciones rápidas y sin complicaciones de salud.
  • El estrés se asocia con significativos cambios fisiológicos. Por ejemplo, el sistema endocrino, tras la liberación de cortisol (hormona liberada como respuesta al estrés), suprime el sistema inmune. Por eso se relaciona también con enfermedades como la psoriasis o la artritis reumatoide.
  • A través de tomografías se ha podido confirmar que las personas que deciden hablarse a sí mismas de una forma positiva lograron remodelar físicamente su estructura cerebral.

Los tratamientos de la psicoinmunología incluyen el trabajo de un equipo de nutricionistas, psicólogos o psiquiatras, pues como ya vimos, el cuerpo funciona de manera integral. Además, gracias a esto, es una rama de la medicina que puede tratar la depresión, dolores físicos como migrañas, colitis, estreñimiento e incluso problemas del sistema nervioso.

En pocas palabras, lo que pensamos y sentimos puede afectar nuestra mente y nuestro cuerpo. Está demostrado que las emociones tienen una respuesta somática, por eso, debemos canalizarlas y aprender a afrontar situaciones de una manera más positiva para evitar alguna enfermedad o aumentar nuestra inmunidad.