Tal vez hayas escuchado que el cambio climático traerá muchas consecuencias negativas para el futuro. Bueno, pues esto en realidad ya está ocurriendo y el planeta ha visto sus efectos a través de la pérdida de masas de hielo en los polos, el calentamiento de la atmósfera y océanos, y la subida del nivel del mar, situaciones que piden a gritos que el ser humano cambie sus hábitos de consumo y reduzca los niveles de contaminación que generan diversos procesos industriales.
Durante el 2020, se vivieron algunos de los eventos más destacados en relación con el medio ambiente; entre ellos estuvieron la reducción del hielo en el Ártico, el récord de huracanes en el Atlántico, los incendios forestales y el calor sostenido, según el portal de las Naciones Unidas.
De hecho, de acuerdo con los datos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el 2020 llegó a ser el tercer año más caliente de la historia registrado, después de 2016 y 2019, alcanzando una temperatura de 14,9 °C aproximadamente. Dicho aumento es responsable de estos fenómenos meteorológicos sin precedentes y se prevé que en este siglo la temperatura tenga un aumento catastrófico de 3 a 5 grados Celsius.
La causa principal del cambio climático el ser humano y sus emisiones de gases de efecto invernadero, como por ejemplo el CO2, que calientan el planeta. Es por ello que también está en tus manos frenarlo. Pero ¿cómo? Puedes comenzar aplicando las 3 “R” de la sostenibilidad:
Una vez teniendo claro los anteriores conceptos es momento de poner en práctica algunas de las de las siguientes acciones:
Lo puedes lograr caminando más o haciendo uso del transporte público y bicicletas. Recuerda que cada litro de combustible produce unos 2,5 kilos de CO₂ por lo que el abuso de los vehículos particulares contribuye al calentamiento global.
Hábitos tan sencillos como apagar el computador o televisor, desconectar electrodomésticos o cargadores, ajustar el termostato de la calefacción o aire acondicionado, usar la lavadora y lavavajillas cuando estén llenos, o reemplazar las ampolletas tradicionales por unas de bajo consumo, podrían reducir muchos kilogramos de dióxido de carbono al año y así el calor del ambiente.
¿Sabías que se necesita una gran cantidad de energía para calentar el agua? Algunas acciones que puedes realizar para evitarlo son instalar un regulador de caudal y lavar o bañarte con agua tibia en lugar de caliente, así dejarás de emitir hasta 100 kilos de dióxido de carbono. Es importante que también cierres las llaves mientras te cepillas los dientes y que revises que no existan fugas o goteos en las mismas.
La ganadería es uno de los mayores contaminantes de la atmósfera, por ende, es recomendable reducir el consumo de carne y aumentar el de frutas y verduras. También puedes contribuir consumiendo alimentos producidos mediante estándares de sustentabilidad y sostenibilidad, prefiriendo siempre los de temporada y los bíos, que emplean menos pesticidas químicos en su producción.
Otros ejercicios de sustentabilidad en casa son comprar un calentador solar, aprovechar la luz natural, usar botellas retornables e incluso comprar menos alimentos empaquetados.
El informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente advierte que el cambio climático ya está aquí y afecta con mayor fuerza a los países y comunidades vulnerables. También menciona que, aunque el 72% de los países ya han adoptado algún instrumento de planificación y adaptación, es necesaria una mayor financiación.
Sin embargo, lo que puedes hacer tú en casa también importa ¿Te unes? Solo es necesario mejorar algunos hábitos y tomar consciencia de cómo nuestras decisiones también afectan al planeta.